
Enseñando mi pasión por la cocina
Por años ha dedicado su vida a la docencia, como se sabe, una profesión que requiere de gran vocación y paciencia.
Pidiendo sabiduría a Dios para llegar con el conocimiento a sus alumnos. Esta es la forma en que Marina Arteaga Peñafiel, magíster en gastronomía, comenta que empieza su día de trabajo en los talleres de su materia en la Universidad de Guayaquil.

​Chef Marina Arteaga junto a sus estudiantes en clase práctica.
El gusto por el arte culinario lo ha tenido desde pequeña, por lo que al llegar a la etapa universitaria decidió entre la carrera de enfermería y la de gastronomía, menciona sonriendo mientras se dispone a dar clases en el aula taller de cocina fría, área en la que tiene especialidad y dicta clases de panadería y técnicas culinarias, argumenta que como profesora tiene el deber de guiar y ayudar a los estudiantes a desenvolverse correctamente en la elaboración de los diferentes platos, aplicar los cortes en vegetales y carnes, así como la preparación de las masas y salsas madres que son utilizadas en diversas recetas, asegurando de esta manera el éxito de los futuros chefs desde las aulas a la vida profesional.
La creatividad y el conocimiento a la hora de mezclar ingredientes o cambiarlos por otros juegan un papel muy importante en la cocina. Marina afirma haber modificado varias recetas, pensando en la buena nutrición y en lo que respecta a la panadería cuenta que ha preparado panes con ingredientes como la chía, la zanahoria, el zapallo y con garbanzos. Estos experimentos requieren ser realizados varias veces hasta obtener un resultado favorable, ya que estamos acostumbrados a consumir un pan sencillo y no vemos las cualidades que poseen los panes bien elaborados, es decir, panes con diferentes nutrientes como los presentes en los alimentos ya mencionados que son necesarios en el desayuno diario, expresa.
Aunque suene repetitivo, ella coincide con la idea de que al momento de preparar un plato, en lo primero que se piensa es en el amor, que se debe ver reflejado en el producto final, considera que la elaboración del platillo es lo que representa al chef.